Relaciones de Compresión en el Ecuador y su Octanaje Ideal
El octanaje es un término muy difundido en el ámbito automotriz, muchas veces mal entendido por el usuario final, sin embargo es bien conocido por los técnicos automotrices las consecuencias que tiene el usar gasolinas de menor octanaje que el ideal requerido por un motor. De hecho es muy posible que en nuestros talleres nos hayamos encontrado con problemas asociados con la falta de octanaje e incluso con graves daños en los motores.
Si bien hay extensa literatura técnica respecto a octanaje y relación de compresión, es interesante plantear cuál es la situación específica en nuestro país, es decir cuál es el impacto real del octanaje que tienen nuestras gasolinas versus la relación de compresión que tienen los autos del parque automotor ecuatoriano.
El octanaje es una característica de la gasolina asociada con la resistencia al calor que ésta tiene y concretamente a no auto encenderse sin la presencia de chispa. Nuestras gasolinas son reportadas de acuerdo a su RON y presentan 82 octanos en la Extra, 92 en la Súper y un poco más de 86 en la Eco. Surge la inquietud por conocer qué tan lejos están estos valores de los ideales que requieren los vehículos que circulan en el Ecuador.
El usar gasolinas cuyo octanaje es menor al requerido ocasionará cascabeleo, sin embargo en función de la electrónica del auto se variará el tiempo de encendido de la bujía, con el objetivo de reducir el autoencendido. Esta acción sin embargo trae como consecuencia una menor eficiencia en la combustión, pérdida de potencia e incluso mayor generación de emisiones. La variación del tiempo de encendido disminuirá la probabilidad de cascabeleo, pero nos alejará de las prestaciones del auto seteadas en su ficha técnica, respecto a consumo, potencia y emisiones e incluso en algunos casos las contra explosiones persistirán.
Puede regularse también la relación de compresión dinámica en función del tiempo de cierre de las válvulas de admisión con respecto a la carrera del pistón, sin embargo de igual manera el resultado será un menor cascabeleo pero un alejamiento de las prestaciones de diseño.
En forma general la relación de compresión de un vehículo va a determinar el octanaje ideal requerido, relaciones más altas requerirán de mayor octanaje.
Existe información bibliográfica a través de la cual se evidencia el requerimiento de octanaje en función de la relación de compresión, la cual puede ser recogida en tablas y curvas:
Una de las curvas presentes en varios foros de mecánica automotriz es la que se presenta a continuación:
Las relaciones de compresión de los vehículos que circulan en el Ecuador nos permitirán conocer de forma referencial el octanaje ideal requerido a nivel del mar. A través de una búsqueda de las fichas técnicas de los vehículos, extraídas de las páginas de marcas concesionarias, blogs y páginas relacionas, se presenta a continuación una tabla que muestra el requerimiento de octanaje de acuerdo a la curva descrita de los autos representativos de nuestro parque automotor:
*La curva utilizada está dada para motores atmosféricos. El hecho de contar con turbos o supercargadores incrementará la presión en la cámara de combustión y por ende la necesidad de mayor octanaje.
Es necesario tomar en cuenta que los fabricantes de los vehículos han trabajado desde hace varios años en estrategias para tratar de disminuir la probabilidad de autoencendido, así por ejemplo conforme ha pasado el tiempo se ha variado la geometría de la cámara de combustión, pues con ello se ha logrado incrementar el área de contacto y la turbulencia de la mezcla combustible.
Otras acciones han buscado disminuir al máximo la temperatura y presión de la cámara, mediante la extracción más rápida de los gases de salida, la regulación de la presión y la temperatura del aire de alimentación e incluso en técnicas de inyección de combustible directas para enfriarla.
Bajo las premisas descritas además de la relación de compresión, existen otros factores por los cuales el requerimiento de octanaje puede variar de un motor a otro, sin embargo los datos presentados en la tabla son referenciales y nos muestran la brecha existente para llegar a tener las condiciones ideales de combustión, que permitirán llegar a los parámetros de performance descritos en fichas técnicas en cuanto a consumo, potencia y emisiones.